La Fibra Dietética y sus Beneficios...

Actualmente y después de treinta años de investigación la fibra dietética forma parte de los que se considera una dieta saludable. No existe todavía  una definición única que englobe los distintos componentes de la fibra dietética y sus funciones. 

Dicho de una manera sencilla, la fibra dietética es la parte de los vegetales comestibles que no podemos digerir; no obstante a su paso por los intestinos esta clase de fibra mejora el proceso digestivo y proporciona toda una serie de beneficios La fibra dietética no e una sola sustancia, sino toda una serie de ellas, particularmente hidratos de carbono complejos;  los más importantes son la celulosa, la hemicelulosa, las gomas, las pectinas, los mucílagos y los lignanos.

Normalmente se divide a la fibra dietética en solube y no soluble  características que modifican el tipo de función que cumplen dentro del aparato digestivo. Las fibras solubles neutralizan derivados de los ácidos biliares potencialmente carcinógenos, contribuyen a disminuir la absorción intestinal de colesterol y ayudan a controlar el azúcar sanguíneo. Las fibras no solubles también minimizan la absorción de colesterol y glucosa en sangre; aumentan el volumen de la materia fecal, facilitando la expulsión, teniendo así una mejor digestión y contribuyen a controlar el peso.

No menos importante resulta el hecho de que tanto la fibra soluble como la insoluble actúan como prebióticos, es decir ayudan a regular la calidad de nuestra flora intestinal, hostilizando a los microorganismos productores de diarrea, gases y mala digestión; favoreciendo a las especies microbianas benéficas, como los lalctobacilos.

Las fibras dietéticas alcanzan el intestino grueso y son atacadas por la microflora colónica, dando como productos de fermentación ácidos grasos de cadena corta, hidrógeno, dióxido de carbono y metano. Los ácidos grasos de cadena corta representan no solo una forma de recuperar energía, sino que van a estar implicados en otras funciones beneficiosas para el organismo humano.

Se le dice "dietética" para el tipo de fibra que favorece la salud que sirve para diferenciarla de la fibra cruda, también presente en los vegetales, pero sin efectos protectores.  Como la fibra dietética es indigerible, no se le considera un nutriente en toda la extensión de la palabra, pero lo que sí resulta incuestionable es que aumentar el consumo habitual de esta clase de fibra, más que recomendable, resulta necesario.

Aun no hay consensos sobre los requerimientos diarios de fibra dietética, pero  se estima que entre 25 y 40 gr diarios son suficientes para un adulto sano (comparado con la cifra de 9 gr diarios que en promedio consumen los habitantes citadinos).

Entre los alimentos comunes más abundantes en fibra dietética están, en orden decreciente; salvado de trigo, salvado de otros cereales (como avena, o arroz), cereales para el desayuno con salvado, frutas secas, ciruelas pasa, brócoli, pera, calabacita, elote, coco, espinaca, almendra, frijol negro, chícharo, plátano, papa y lenteja.

Es importante que al consumir fibra dietética, se consuma agua para que esta tenga el efecto digestivo deseado. Uno de los pocos inconvenientes de la fibra dietética es que los alimentos muy concentrados de ella, como el salvado o los cereales altos en fibra, hacen insolubles a los minerales de los alimentos que se ingieren al mismo tiempo; así que para que la fibra no le reste  poder nutricio a la comida, el salvado o cereal no deben consumirse junto con los alimentos principales, sino como colación.