martes, 15 de abril de 2014

4 Hábitos con la Comida que Impiden que Tengas el Cuerpo Perfecto

Estos son los 4 errores más recurrentes que detecto cuando una persona pisa mi consultorio, y son los que hacen que una persona no logre sus objetivos a la hora de conseguir el cuerpo perfecto

ERROR #1.  NO Comer antes de hacer Actividad Física. Este es el error más común, sin alimento el organismo no tiene "combustible", por lo que el cuerpo entra en un estrés metabólico haciendo que el tejido muscular se vaya depletando,  y  el porcentaje de grasa corporal vaya en aumento. Esto solo provoca que el músculo no se tonifique de la manera adecuada y no logres la intensidad adecuada a la hora de entrenar.
  • Solución: Come una combinación de hidratos de carbono complejos y simples y un poco de proteína media hora antes de tu entrenamiento (Fruta con queso cottage y amaranto) 

ERROR #2. NO Comer después de Entrenar. Después de hacer actividad física, el organismo necesita proteína para reparar el tejido muscular y mantener el metabolismo acelerado, y también hidratos de carbono complejos para remplazar la energía "gastada". 
  • Solución: Comer una proteína magra, como claras de huevo acompañado con pan tostado o un sándwich.  
ERROR #3. Excederte con la comida sana. No creas que puedes extralimitarte con comidas o alimentos que consideras saludable, todas tienen calorías. Y se van sumando si no vigilas cuántas consumes.
  • Solución: Controla las porciones!! El chiste de un plan de alimentación saludable siempre serán las porciones. Y estas siempre estarán adecuadas conforme a tu edad, estatura y peso. Asesórate con tu nutriólogo. 
ERROR #4. Vivir comiendo "Barritas". Hasta las barritas que dicen contener mucha proteína y fibra y poca azúcar, no pueden sustituir una comida balanceada, porque simplemente no tienen los mismos nutrimentos que tienen los alimentos que se extraen de un huerto o un árbol.
  • Solución: Come alimentos "de verdad" y apóyate en las barritas sólo como suplemento dietético si estas apurado y quieres energía rápida. 

jueves, 10 de abril de 2014

¿Sabías que una cucharada de semillas de chia tiene más calcio que un vaso de leche?

La Chía es una planta originaria de áreas montañosas que se extiende desde México hasta Guatemala, y los aztecas, mayas e incas utilizaban esta semilla como elemento básico en su dieta, junto con la quinoa y el amaranto, conformaban parte importante de su alimentación...Chía significa “fuerza” en maya.
La Chía tienen un sorprendente contenido vitamínico y proteico para ser un alimento tan pequeño: ácido alfa-linolénico y linoleico, mucina, estroncio, vitaminas A, B, E y D, y minerales como el calcio, fósforo, potasio, azufre, hierro, yodo, cobre, zinc, sodio, magnesio, manganeso, niacina, tiamina, silicio, y antioxidantes y una cucharada de semillas de chia tiene más calcio que un vaso de leche, más Omega-3 que el salmón y más antioxidantes que los arándanos. También son un energético ideal y sirven como auxiliar en la pérdida de peso.
 Por sus múltiples propiedades nutricias y medicinales se utiliza en bebidas naturales que ayudan a la resistencia de los atletas, para la pérdida de peso suprimiendo el apetito, debido a su alto aporte de fibra, ayudando a la nivelación de azúcar en la sangre y a la regulación intestinal. A parte tiene un gran aporte de ácidos grasos Omega 3, que nos ayudan a subir el colesterol bueno en sangre y bajar el malo, así como a regular muchas funciones metabólicas, como aquellas que participan en la transmisión de las señales nerviosas y neuronales así como en las actividades glandulares, por lo que la Chía es un alimento nutracéutico importante para la salud de nuestra población.
A continuación, te doy algunos ejemplos de cómo puedes incorporar esta maravillosa semilla en tu alimentación diaria:
1. Dulce de Chía
Los niños amarán esta deliciosa natilla que los llenará de energía y es sumamente nutritivo:
2 tazas de leche de coco o de almendras o soya
1/2 taza semillas de chía
2-3 cucharadas de cacao en polvo (o al gusto) (opcional)
1 cucharadita de vainilla (al gusto)
1 cucharada de azúcar o miel
Pon todos los ingredientes en una licuadora y licua hasta que quede suave. Déjalo espesar unos 10 minutos en el refrigerado y sirve. Hay infinitas variaciones de sabor, puedes omitir el polvo de cacao y la vainilla y agregar una taza de fresas, por ejemplo.
2. Para espesar la sopa o salsas
En lugar de utilizar sazonadores o espesante a base de almidón o maíz, para espesar tus sopas y tus salsas, agrega un par de estar semillas trituradas o molidas.
3. Para empanizar pescado, pollo o carne
Mezcla las semillas molidas con un poco de harina integral o de almendras, ajo en polvo y una pizca de sal y tendrás un excelente sustituto del pan o harina para empanizar. Tus platillos quedarán deliciosos y muy crujientes.
4. Espolvoréala en tus alimentos o tómala en agua
En México, una de las aguas más tradicionales (aparte de la de jamaica, tamarindo y horchata) es la de limón con chía que es deliciosa y fresca. También puedes mezclarla en ensaladas, con granola y amaranto para añadirla en yogurt o bien con leche para un rico licuado.